sábado, 28 de marzo de 2009

Improntas

No conozco tu piel
ni tus manos
ni tus pies.

No conozco el cristal
Ni tu almohada
Ni la tierra que esconden tus plantas
Ni el castañear de tus dientes
Ni ese cuerpo deshollado
deshabitado
que te empeñas en abandonar cada cierto rato.

No conozco el abrazo
brazos encorvados queriendo acabar con el espacio.
No sé nada de tu risa
nada de la impronta de tu andar irregular.

Nada de tí sé prisma de mi ser
agujero de columpio
biberón vacío
sequedad de las vías
alaridos nocturnos
rostro de espanto
carcajada de buitre
mueca de hiena
ala de cuervo
chillido de gata en celo
ojos de cerdo
mirada en fuga constante
pena varada
alma que no se resigna a ser del aire
manos que quieren tener padre.
Hécate

1 comentario:

Patricia Ma. Barraza dijo...

Hola:
Espero tu material para el siguiente número, tengo dos semanas para recolectar.
Saludos.